Puigdemont celebra el descalabro de Cs en Andalucía: «Disfrutemos de la derrota de este residuo político»
La formación naranja no ha logrado los votos necesarios para obtener representación en el Parlamento de Andalucía
El expresidente de la Generalitat de Cataluña Carles Puigdemont. EFE/David Borrat
El expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont ha celebrado el descalabro electoral de Ciudadanos en las elecciones de Andalucía, después de que la formación naranja haya pasado de los 21 escaños obtenidos en los comicios de 2018 a quedarse sin representación en el Parlamento andaluz.
Puigdemont ha calificado a la formación en Andalucía de «residuo político» y ha animado a disfrutar de su «derrota». En esta línea, ha afeado que el partido político, originado en Cataluña, naciese «de la mano de algunos personajes cargados de odio».
Asimismo, ha recriminado que la fundación del partido político presidido por Inés Arrimadas se llevara a cabo con el dinero «que le facilitó una gente que creía que controlar un banco servía para controlar un país».
Cs desaparece del Parlamento de Andalucía
Desde 2019 la formación naranja no levanta cabeza y, tras las elecciones de este domingo, pasaron de presidir la Junta de Andalucía a desaparecer del Parlamento andaluz. Los de Juanma Marín no lograron superar la barrera del 3% de los votos necesarios para obtener representación. Así, perdieron los 21 diputados que consiguieron en las pasadas elecciones autonómicas y dieron comienzo a su disolución.
Tras obtener estos resultados, el líder andaluz de la formación naranja y candidato a la Junta, Juan Marín, ha anunciado este lunes su dimisión de todos sus cargos, si bien continuará manteniendo su militancia. Asimismo, ha rechazado la posibilidad de entrar en el Gobierno andaluz como independiente.
«No sé que he hecho mal para un castigo tan duro», ha lamentado en una entrevista en la SER recogida por EFE. «Me quedo como militante de base», ha manifestado Marín, que no ha sabido explicar los motivos de la profunda crisis que vive su partido en el resto del país. El todavía vicepresidente andaluz ha esgrimido que su partido ha hecho un «buen trabajo» en esta comunidad, pero que «no ha sabido» rentabilizar su presencia en el Gobierno autonómico.
Sobre el futuro de Ciudadanos, Marín ha considerado que el partido debe acometer un «cambio total», pero no ha querido pronunciarse sobre quién puede ser su sucesor. «Ninguno de los que nos hemos presentado hemos conseguido el apoyo. No tengo a nadie en mente, pero hay gente con experiencia y buena en todas las provincias», ha declarado.
