Moreno se erige en portavoz de Valencia, Murcia y La Mancha y pide un fondo transitorio de 1700 millones
El presidente andaluz reclama una compensación anual de 824 millones para Andalucía, un decreto de sequía e infraestructuras para liderar la producción de energías renovables
Pedro Sánchez recibe a Juanma Moreno en el Palacio de la Moncloa este jueves.
En tanto no se acometa la reforma del modelo de financiación autonómica, que data de 2009, el Gobierno de España debe habilitar un fondo transitorio de compensación de 1731 millones de euros, prorrogable año a año, para las cuatro comunidades autónomas más castigadas por el actual modelo de financiación: Andalucía (824), Valencia (648), Murcia (194) y Castilla La Mancha (65).
Ésta ha sido la principal reivindicación que le ha hecho Juanma Moreno a Pedro Sánchez durante la reunión que han mantenido ambos líderes este jueves en el Palacio de la Moncloa, en una jornada que ha servido, además, como puesta de largo en Madrid de su arrolladora mayoría absoluta en el otrora bastión socialista frente a un presidente, a la luz de las encuestas, en horas bajas.
En palabras de Moreno, el actual sistema de reparto es «injusto y obsoleto» pero dado que su modificación es una «tarea ardua y compleja», y asume que va a ser imposible que el Gobierno de España lo aborde en esta legislatura -«va para largo» ha llegado a decir-, es necesario tomar decisiones que palien este castigo financiero al que le quiere poner cara y mensaje Moreno.
«Desde Andalucía hemos arbitrado una solución que nos parece razonable: fondo transitorio de nivelación prorrogable hasta que no haya un nuevo sistema», sostiene en representación de las cuatro comunidades infrafinanciadas, tan dispares en sus circunstancias sociales como en su condición política.
En el debate de la financiación no hay consenso ni entre comunidades gobernadas por el mismo signo político ni en el seno de los partidos mayoritarios. Por eso, el Gobierno repite como un mantra que debe ser un debate que se aborde entre todos, pero fundamentalmente entre los partidos mayoritarios, y el andaluz pide que sea «quien lleva la púrpura» quien marque el paso. «El camino se hace caminando», ha expuesto machadianamente el presidente andaluz.
Ya en septiembre del pasado año, la sintonía entre las comunidades castigadas se escenificó con el presidente socialista Ximo Puig, semanas más tarde con el presidente de Murcia, el popular López Miras. Según ha compartido, este entendimiento también existe con Castilla La Mancha, gobernada por el socialista García Page, aunque el «nivel de interacción con este gobierno ha sido menor porque es la «la menos afectada».
El argumento principal del Gobierno andaluz es que desde que Zapatero aprobó, junto a ERC, este modelo Andalucía ha perdido más de 11mil millones de euros, cifra que sube cada año que pasa. «Cada andaluz recibe al año 114 millones menos que la media de España. Es mucho dinero. Tengo la firme obligación de intentar entenderme con el resto de administraciones, pero con la firme determinación de exigir lo que es justo para mi tierra”, ha argumentado el presidente en la rueda de prensa posterior al encuentro.
Al respecto de este asunto, el presidente Sánchez se ha comprometido «a estudiar» esta propuesta, según la interpretación del andaluz. «Ha tomado nota, espero que no quede en un apunte», ha dicho. Sin embargo, la ministra de Política Territorial y portavoz del Ejecutivo central, Isabel Rodríguez, en su comparecencia ante la prensa, rebajó las expectativas y se centró en reiterar la necesidad de abordar la financiación «de manera integral y no con parches», impulsado a partir del «acuerdo entre los dos grandes partidos» y señaló el Consejo de Política Fiscal y Financiero como único instrumento válido de diálogo entre comunidades y con el Gobierno al respecto de estos temas.
En el transcurso de la reunión, el Ministerio de Hacienda ha informado que el Gobierno de España ha abonado este jueves a la administración andaluza un total de 1.726,62 millones de euros en conceptos de entregas a cuenta de este mes y la compensación recogida en los Presupuestos Generales del Estado de 2022. En total, Hacienda ha ingresado en las arcas andaluzas en conceptos de entregas a cuenta y liquidación y compensación desde el mes de enero hasta la fecha 12.086,35 millones de euros, un 6,3% más que el mismo periodo de 2021.
Andalucía, la última en un maratón de reuniones
La financiación autonómica ha estado, asimismo, encima de la mesa de los encuentros de Sánchez con Fernández Mañueco (Castilla y León) y Alfonso Rueda (Galicia). Si hace dos semanas, el protagonista fue el presidente de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonés, en una reunión que sirvió para retomas las relaciones rotas tres meses atrás por la crisis de Pegasus, este jueves, Sánchez repartió el protagonismo en los tres últimos presidentes autonómicos investidos.
Moreno había pedido ser recibido en septiembre, de modo que le diera tiempo a trabajar el listado de peticiones al Estado con su equipo de consejeros, encabezados por el de Presidencia, Antonio Sanz, que lo ha acompañado en Madrid. Sin embargo, Moncloa decidió agendarlo en esta maratoniana jornada, decisión que no ha sentado bien pues, a juicio del líder andaluz, Andalucía, como comunidad histórica y la más poblada de España, hubiera merecido un trato diferenciado. Con todo, en estos momentos desde San Telmo, sede del Gobierno andaluz, anteponen el pragmatismo a la confrontación, esto es, aspirar a una mejor financiación y a la búsqueda de puntos en común.
De hecho, en el documento de 86 reivindicaciones «sensatas, justas y oportunas» que entregó al presidente del Gobierno, se incluía la petición de una mesa bilateral de diálogo con el Gobierno de España, como así contempla el Estatuto de Autonomía, y como la que ya tienen activada la Generalitat de Cataluña y como ya exigió hace un año, en la primera y hasta este jueves única vez que Sánchez ha recibido a Moreno.
De sus propias palabras se infiere que en este momento para Andalucía, en el contexto actual de crisis inflacionista, es más importante el contenido que el formato con todo, le molestan las diferentes varas de medir entre autonomías: «Es muy importante que entre todos hagamos una España donde no haya privilegios por parte de nadie porque eso será mucho mejor para todos».
Este documento de peticiones será remitido a cada uno de los ministerios competentes en las respectivas materias y se hará un seguimiento. «Voy a ser muy pesado», bromeó con la prensa. El año pasado, entregó un documento con 88 peticiones, del que quedan por cumplir 55 medidas y 12 están en trámite.
Sintonía en agua, energías renovables y sedes del Estado
Así, si bien la puesta en marcha de este fondo de compensación tiene diferentes interpretaciones dependiendo del interlocutor, lo cierto es que ambas partes, Junta y Estado, han manifestado un relativo entendimientro en otros ámboitos, fundamentalmente en la política del agua y el reto de la sequía, la política de infraestructuras para la producción de energías renovables, que tienen que ver fundamentalmente con la ejecución de los fondos europeos, y, por último, la descentralización de las sedes del Estado.
Sobre la política del agua, Moreno ha defendido que es «fundamental y elemento clave del sistema productivo de Andalucía», como primera comunidad en producción agrícola. «Para Andalucía, el agua es como para Alemania el gas; sin agua, la economía se muere. La agricultura y el turismo, nuestros dos motores económicos, necesitan agua», ha razonado.
Sobre la política agraria común, la PAC, que ha soliviantado a las organizaciones agrícolas en Andalucía, Moreno ha pedido a Sánchez, que se modifique la configuración de las regiones productivas y se amplíen de 8 a
12 los ecoesquemas para reflejar la diversidad del campo andaluz. «Si la tercera economía de España no va bien, España no va bien», ha alertado.
A este respecto, Moreno ha recordado que el Gobierno andaluz ha declarado dos decretos de sequía con 145 millones de euros, frente a un decreto del Gobierno de la Nación por 9 millones de euros, por lo que ha pedido un nuevo decreto de medidas contra la sequía «con una dotación económica potente y de ejecución inmediata». Asimismo, para luchar contra la sequía lo perentorio es, ha explicado, acometer las infraestructuras hídricas declaradas de interés general del Estado, como las conducciones, pantanos y desaladoras en el litoral.
Sobre materia energética, Moreno ha anunciado que quiere convertir Andalucía en potencia energética «porque tiene todas las condiciones necesarias para serlo. Este salto sería factible para la comunidad, pues tiene 9 GW de potencia renovable instalada y unos 25 GW en tramitación. «Al menos la mitad se harán realidad esta legislatura; vamos a
duplicar en cuatro años nuestra capacidad, lo que va a garantizar la autosuficiencia energética”.
Los proyectos que garanticen el desarrollo de la red de transporte de la energía que se vuelque en el sistema eléctrico necesitan una inversión de 736 millones de euros. Tanto para las obras hidráulicas como para las energías renovables, Moreno ha pedido a Sánchez un esfuerzo en materia de fondos europeos, «porque si no se gastan hay que devolverlos».
Otro de los temas donde ha habido, en palabras de Moreno y de la ministra Rodríguez, una especial sintonía es el acercamiento a Andalucía de sedes de importantes organismos como son la Agencia Española de Supervisión de la Inteligencia Artificial, para Granada, y la Agencia Espacial Española y el futuro Centro Estatal de Salud Pública, para Sevilla.
En el caso de la Agencia Espacial, por ejemplo, Moreno ha subrayado el respaldo de la comunidad científica, empresarial y del resto de administraciones, caso del Ayuntamiento de Sevilla, para la consecución de esta agencia. La madrileña Díaz Ayuso ya ha mostrado públicamente su disconformidad, postura que deliberadamente evitó valorar el presidente andaluz en una jornada que, aunque se alargó casi al filo de la noche, evidenció que disfruta de los días álgidos de su carrera.
