Núria Parlón, la diputada que no votó a favor del BCN World, opta al liderazgo del PSC
Los dirigentes territoriales del partido avalan su candidatura para que sea primera secretaria
Los dirigentes territoriales se han reunido y han acordado…que Núria Parlón, la alcaldesa de Santa Coloma, presente su candidatura a la primera secretaría del PSC. Y Parlón ha aceptado el reto.
Pero, ¿no había en el PSC un problema ideológico? ¿No había una discusión sobre un proyecto de sociedad, sobre cómo compaginar un legado netamente catalanista con el proyecto soberanista que defiende ahora una parte importante de ese mismo catalanismo?
Pere Navarro dimitió el miércoles por la tarde como primer secretario del PSC. Él mismo anunció que un consejo nacional extraordinario decidirá cómo y cuando, se elige a una nueva dirección. Pero apenas 48 horas después, los dirigentes territoriales ya han pactado un nombre: Núria Parlón, alcaldesa de Santa Coloma, diputada en el Parlament, con 39 años, formada y con buena imagen. Tiene todo lo que la nueva política exige en este momento. ¿Estaba cocinado, por tanto, el relevo de Navarro por los propios dirigentes que antes le habían apoyado?
¿Cocina previa?
Parlón había apoyado a Pere Navarro. Fue la número 3 en las listas que encabezó Navarro al Parlament de Catalunya en noviembre de 2012.
Núria Parlón se ha caracterizado en las últimas semanas por mantener contactos con la llamada “clase media” del PSC. Dirigentes del sector crítico, como Joan Ignasi Elena, o miembros de la ejecutiva, como Jordi del Río, o dirigentes como el alcaldable por Barcelona, Jaume Collboni.
Una de las ideas centrales de todos ellos es que Navarro había pecado de no tener mucha cintura en el debate sobre el derecho a decidir, y que era necesario que el partido no mantuviera una actitud tan frentista.
Perfil de izquierdas
Antes, sin embargo, Parlón protagonizó, junto a Joan Ignasi Elena, un distanciamiento con la dirección del PSC, al decidir no asistir al Parlament y no votar, por tanto, a favor del proyecto turístico de BCN World, lo que creó un gran malestar en una parte importante de los cuadros y dirigentes socialistas. Parlón se ha identificado con posiciones de izquierdas, y como alcaldesa ha querido centrarse en políticas favorables a la creación de empleo.
Ese perfil, ahora, es apreciado, porque la presión de los movimientos sociales y de fenómenos como el de Podemos inquieta en las filas del PSC y del PSOE. El proyecto de BCN World, sin embargo, lo acordó Pere Navarro con el President Artur Mas, recuperando al PSC en las posiciones centrales de la política catalana.
Pero, ¿hay algo más, por ahora? Se verá en las próximas semanas, cuando se acerque la fecha del congreso extraordinario, que se podría convocar para el 19 y 20 de julio.
Sin tiempo para discusiones
No hay, sin embargo, apenas tiempo para un debate sobre el proyecto del PSC, porque, ¿qué quieren hacer los socialistas catalanes? ¿Qué proyecto de sociedad ofrecen en un momento de convulsión, en el que se piden respuestas ante un modelo económico que dejará a muchas personas en la estacada, a pesar de que Catalunya y España ya comiencen a crecer?
Este mismo viernes los primeros secretarios de la mayoría de federaciones del PSC le han ofrecido su apoyo. Parlón ha aceptado el envite y será candidata a la elección de la primera secretaria del PSC. Como ha ocurrido en el pasado, las federaciones del Baix Llobregat y de Barcelona han sido decisivas.
El primer secretario del Baix Llobregat, Antoni Poveda, alcalde de Sant Joan Despí, y el primer secretario de Barcelona, Ferran Pedret, junto a Collboni, son piezas básicas en cualquier decisión.
Rápido, muy rápido
Y la idea inicial es ir rápido, rápido. Y convocar el congreso extraordinario para el sábado 19 de julio, justo una semana antes del congreso del PSOE, que también deberá elegir a su secretario general.
Para ser candidato se deberá reunir unos 2.000 avales, teniendo en cuenta que podrán votar los 18.000 militantes del partido, que tendrán una semana para poder hacerlo.
¿Por qué no se quiso ganar tiempo?
Pero lo que ocurra en ese congreso, tendrá una fecha de caducidad: hasta las municipales de 2015, si es que no ocurre nada antes de esa fecha. Una de las ideas-fuerza que defendía Pere Navarro, y otros dirigentes que le apoyaron en su momento, es que el PSC debía esperar, y resistir ante el 9 de noviembre. Con la convicción de que difícilmente se podrá celebrar la consulta soberanista, el PSC quería ganar tiempo, y convencer a la sociedad catalana y al PSOE de que la mejor solución pasaba por una reforma de la Constitución.
En función de lo que ocurra en los próximos meses, el PSC podría acabar de cerrar el círculo con otro congreso, esta vez buscando un nuevo ideario ideológico. Pero, entonces, ¿para qué buscar a una mujer, joven, bien preparada, que sólo trate de aguantar el partido como se pueda, a la espera de lo que ocurra en Barcelona, con la candidatura de Jaume Collboni?