Las estrambóticas propuestas de Bescansa para tratar de seducir a Homs
Podemos intentó sin éxito que Democràcia i Llibertat apoyase a su candidata a la presidencia del Congreso para desbancar a Patxi López
El PSOE, Podemos y Ciudadanos han fracasado en sus negociaciones a tres bandas. Los socialistas culpan a los podemitas. Pero Pablo Iglesias asegura que su partido no ha hecho más que «ceder, ceder y ceder» sin que las otras dos formaciones hayan valorado tanta cesión.
En Podemos tienen una extraña forma de negociar y así se atestigua por las conversaciones que en su día mantuvo la secretaria de análisis político y social del partido, Carolina Bescansa, con el líder de Democràcia i LLibertat, antigua Convergència, en el Congreso, Francesc Homs.
El cuento de la lechera en versión Podemos
Bescansa trató de convencer a Homs de que votará por ella para presidir el Congreso de los diputados. Ambos políticos mantuvieron una larga charla, que poco a poco se iba tornando más disparatada, pues la diputada podemita planteó el acuerdo como quien se hace el cuento de la lechera.
Los candidatos a la presidencia de la Cámara baja eran tres: Celia Villalobos por el PP, Patxi López por el PSOE y la propia Bescansa por Podemos. Ciudadanos había llegado a un acuerdo con los socialistas y se había comprometido a votar a López.
Objetivo: tener varios grupos parlamentarios
Para Podemos lograr la presidencia del Congreso era de una importancia vital, porque la formación se había presentado a las elecciones del 20 de diciembre con diferentes marcas autonómicas y quería que cada una de ellas tuviera su propio grupo parlamentario, algo a lo que se oponían el resto de partidos.
Bescansa planteó a Homs su visión de la jugada: en una primera votación, Ciudadanos no apostaría por el socialista Patxi López, pues, para hacerse valer, los de Albert Rivera esperarían a una segunda vuelta para apoyar al candidato del PSOE.
Segunda vuelta
En esa tesitura, si Democràcia i LLibertat junto a otras fuerzas políticas como el PNV votaban por sorpresa a favor de Bescansa, López quedaría en tercer lugar. Eso lo eliminaría de la contienda, ya que según el reglamento del Congreso, sólo pasan a la segunda vuelta los dos candidatos más votados.
Quedarían entonces Villalobos y Bescansa y los socialistas se verían obligados a secundar a la candidata de Podemos para evitar alinearse con el PP. Así, la representante popular también quedaría eliminada y el partido de Pablo Iglesias se haría con el control de la Cámara.
Los peros de Homs
A medida que Bescansa planteaba su proyecto, Homs le iba sacando peros. El dirigente nacionalista no veía nada claro que Ciudadanos tuviera intención de esperar a una segunda vuelta para cumplir su acuerdo con el PSOE.
A Homs tampoco le cuadraba que, en caso de que se descartase a López, los socialistas se inclinasen sin remedio por la candidata de Podemos. Pero los inconvenientes planteados por Homs no desanimaban a Bescansa, quien estaba firmemente convencida de que su plan tenía muchas posibilidades de materializarse.
La satisfacción de ver al pueblo presidiendo en Congreso
A lo largo de la charla, Homs recordó en varias ocasiones a la dirigente de Podemos que, aunque su partido está a favor de la independencia de Cataluña, no es precisamente una formación de izquierda radical, pero esas observaciones tampoco desanimaron a su interlocutora.
Finalmente, Homs hizo la pregunta del millón: «¿Y yo que gano con todo esto?». Bescansa tenía una buena respuesta preparada: «La satisfacción de que el pueblo presida el Congreso de los diputados».
A esas alturas, Homs ya estaba perplejo, pero alcanzó a dar una respuesta con la que zanjó la conversación: «Yo creía que el pueblo presidía el Congreso de los diputados desde hace 40 años».
Podemos no se salió con la suya y ese pacto entre el PSOE y Ciudadanos al que luego se sumó el PP permitió que López sea el nuevo presidente de la Cámara baja española.