La pinza entre ERC y PP retrasará los presupuestos de 2014
El PP quiere llevar la Ley de Medidas fiscales al Consell de Garanties EstatutĂ ries, y Esquerra gana tiempo para asegurar la pregunta de la consulta soberanista
Pinzas. Los diputados catalanes hablan de pinzas en los últimos días, de bloqueos entre diferentes fuerzas políticas que impidan la soñada consulta soberanista, sumidos en un bucle político permanente.
Esquerra Republicana, que está dispuesta a ganar la partida de la consulta soberanista, considera que se ha establecido una curiosa pinza entre Unió Democràtica e Iniciativa-Verds para rechazar una pregunta que constate, sin subterfugios, si se está a favor o no de la independencia de Catalunya.
Pero existe otra pinza, todavía más curiosa: la formada por Esquerra y el PP, que, con intereses diferentes, pueden provocar un mismo objetivo: retrasar la aprobación de los presupuestos, lo que ha inquietado en los últimos días al Govern de Artur Mas, muy nervioso ya porque todo el proyecto político puede saltar por los aires.
La ley de las tasas
La cuestión es que el PP, aunque hay otros grupos interesados como Ciutadans, ultima en las próximos días la presentación de un recurso ante el Consell de Garanties Estatutàries contra la Ley de Medidas Fiscales, o ley de acompañamiento, que incluye todas las tasas que quiere poner en marcha el Govern de CiU en el próximo año. La premura a la hora de fijar esos nuevos impuestos, –se recupera Sucesiones– la propia legalidad de algunos de ellos, con la visión en contra, incluso, de algunos letrados del Parlament, ha llevado a la dirección del PP a considerar esa posibilidad. El Consejo Económico y Social, el Ctesc, ya mostró sus reservas sobre algunas medidas.
Y el PP, de hecho, ha sondeado a otros grupos, según fuentes parlamentarias, para ver qué consenso podría lograr. Y las dudas existen en el seno del grupo del PSC y de ICV, pero los dos grupos de izquierda no presentarán recurso. El PSC entiende que, después de reclamar durante meses que el Govern presentara los presupuestos, ahora no puede entorpecer más las cuentas de 2014. Y los ecosocialistas –que están viviendo con angustia cómo se desarrolla el debate sobre el derecho a decidir– lo rechazan también, aunque critican que la Ley de Medidas Fiscales se haya convertido en “una ley ómnibus, donde cabe todo, y ha dejado de ser una ley estrictamente financiera”.
Ciutadans desea hacerlo, pero para poder presentar un recurso se necesitan, al menos 13 diputados, que ahora no tiene la formación que lidera Albert Rivera.
El pleno decisivo del 16 de diciembre
Los presupuestos y la ley de acompañamiento se deben aprobar en el próximo pleno en el Parlament del 16 de diciembre. Son dos leyes que se tramitan por separado, y que se suelen votar en un mismo pleno. Respecto a la ley de presupuestos, el trámite parlamentario deja claro que se deberán votar en ese pleno, pero si se recurre la Ley de Medidas Fiscales, el Consell de Garanties Estatutàries podría necesitar unas semanas para emitir su veredicto. Y, aunque fuera muy rápido, y a favor de las tesis del Govern, difícilmente se podría aprobar la ley antes de que acabe el año.
¿Qué quiere decir eso? Como en las relaciones comerciales, como en los tratados internacionales que buscan un bien común, se trataría de un win-win, un todos ganan, menos el Govern de Artur Mas, incapaz de liderar la agenda política catalana.
Victoria para el PP, y para ERC
El PP quiere reflejar la impericia del Govern, el mal gobierno, la precipitación de unas medidas que han buscado contentar a Esquerra Republicana, al no contar con más socios parlamentarios.
Y para Esquerra podría ser una decisión, la del PP, de una enorme importancia. En el pleno del 16 de diciembre, los grupos favorables al derecho a decidir, CiU, ERC, ICV y la CUP deberían acordar la pregunta y la fecha de la consulta. Pero el propio Mas, y el conseller de Presidència, Francesc Homs, han dejado claro que agotarán hasta el último suspiro de 2013, para acordar la pregunta, que será “inclusiva”, según el President, y que deberá contentar a ICV y a ERC.
Esquerra, por tanto, se asegura que habrá fecha y pregunta, y con todo ese paquete bajo el brazo podrá votar más tarde la Ley de Medidas Fiscales, que, desde un punto de vista estrictamente político, es la que cuenta. Tendrá, por tanto, una carta en la manga si no le satisface el acuerdo o el no acuerdo sobre la consulta.
Callejón sin salida
Por tanto, a Esquerra le interesa que el PP fuerce esa demora en las cuentas de la Generalitat. Y también a otros grupos, como a ICV o al PSC, porque podrán centrar el debate sobre la ley en cuestiones estrictamente socio-económicas, esté o no resuelto el tema de la consulta soberanista.
Pero para el President Mas todo esto están siendo agónico, aunque fue él mismo quien se adentró en este callejón sin salida.