Josep Maria Álvarez acelera su relevo al frente de la UGT de Cataluña
La decisión del secretario confederal, Cándido Méndez, de regenerar la organización incrementa la presión sobre el líder catalán para que cierre un mandato de 25 años
UGT de Cataluña también avanzará su congreso para renovar la dirección del sindicato. “Los cambios son de tal magnitud que debemos adaptar nuestra estructura”, indica el actual secretario general, Josep Maria Álvarez, en conversación con Economia Digital.
El avance de las elecciones en el seno del sindicato en España por una “decisión personal” de Cándido Méndez ha forzado la situación, indican otros interlocutores de la organización. Álvarez reconoce que existe “presión externa para que me vaya y mucho cariño interno para que me quede”. Su decisión es clara: “Tal y como avancé en el último congreso, en ese momento dejaré la secretaría general”.
Elecciones confederales
Formalmente, el congreso autonómico se podría celebrar en 2017 tal y como estaba previsto. El confederal tendrá lugar en 2016, un año y medio antes de lo que debería. Según los nuevos estatutos del sindicato, una vez elegida la cúpula estatal se deben convocar en cascada las elecciones en el seno de las organizaciones territoriales. “Estábamos dentro de plazo”, indica Álvarez. Al ser preguntado sobre si se adelantará, es claro: “Lo haremos”.
El líder sindical catalán ha tenido que hacer frente a las críticas in crescendo de que no cediera la primera fila de acción tras 25 años en la cúpula de UGT Cataluña. Su mandato ha sido más largo que el de Méndez, señalan las fuentes citadas.
Regeneración
Acusa el mismo problema que el líder sindical nacional, remarcan las voces críticas de la UGT de Cataluña: la falta de regeneración.
Ello no le ha impedido que su nombre aparezca entre los candidatos que tienen oportunidad de tomar el testigo de Méndez. En los mentideros de la capital se destaca que su experiencia es básica para poder afrontar la gran transformación que afronta la organización. Los sindicalistas hablan directamente de refundación, ya que se deben fusionar las seis federaciones actuales en tan sólo tres: industria, servicios y administraciones públicas.
Ante una posible sucesión de Méndez, el gran handicap de Álvarez es su trayectoria paralela a la del propio Méndez. Tiene casi la misma edad que él, cumplirá 59 años, lleva más de dos décadas al frente del sindicato y ante los ojos de la militancia representa a una generación salpicada por los escándalos de corrupción que ha tenido que hacer frente la organización.
Falta de relevo en la UGT catalana
UGT de Cataluña tampoco tiene resuelto el capítulo de la sucesión. El presidente del comité de empresa de Seat, Matías Carnero, ya ha manifestado que la automovilística es su prioridad y que existen “muchos compañeros preparados para ser candidatos”.
Hay otros nombres sobre la mesa, desde a mano derecha del aún secretario general, Diego Martínez, a una de las voces más críticas, el responsable comarcal de UGT en el Vallès Occidental, Josep Sancristófol. Pero ninguno de ellos tiene tras de si un apoyo suficiente para conseguir la secretaria general. “La lucha por el poder en la organización crecerá en los próximos meses”, indican interlocutores del sindicato que prefieren mantener el anonimato.
La caja de Pandora se acaba de abrir.