Fernández Díaz buscó con la Oficina Antifraude cómo inculpar a dirigentes soberanistas
El responsable del organismo, Daniel de Alfonso, admite las reuniones con el ministro, pero rechaza una operación "conspirativa", porque "no se concretó en ningún expediente ni en nada"
Los partidos soberanistas se agarran a un hecho para considerar que el ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, conspiró para tratar de inculpar a los dirigentes de Convergència y de Esquerra poco antes de la consulta del 9N. Y es que Fernández Díaz se reunió en distintas ocasiones con el director de la Oficina Antifraude de Cataluña, Daniel de Alfonso, para conocer en qué causas se podía inculpar al soberanismo.
Los audios de una de las reuniones de Fernández Díaz con Daniel de Alfonso los ha revelado el diario Público. El propio De Alfonso asegura a Economía Digital que esas reuniones se produjeron, pero que «no hubo ninguna conspiración, porque, de hecho, no hubo ninguna causa posterior, la oficina no elaboró ningún expediente».
El ministro Fernández Díaz recabó información a Daniel de Alfonso sobre el ex conseller Joan Carretero y sobre el hermano de Oriol Junqueras, Roger Junqueras. Éste trabajaba en CESPA, del Grupo Ferrovial. La idea era encontrar presuntas irregularidades en las adjudicaciones que había realizado el tripartito a la empresa. También se interesó el ministro sobre los posibles trapos sucios de los entonces consellers Felip Puig y Francesc Homs.
De Alfonso, en las conversaciones con Fernández Díaz, asegura que la Oficina Antifraude está investigando «cosas de Esquerra», pero con indicios «muy débiles». El ministro insiste en saber si realmente son débiles o pueden ser más importantes, y los dos reflexionan sobre las consecuencias en el proceso soberanista. En esas conversaciones también aparece el Grupo Planeta. De Alfonso asegura que está intentando «convencer» a Planeta para que le haga una investigación, que le permita comprobar un caso que sigue sobre el padre de Junqueras.
También se buscan trapos sucios de Felip Puig, a través de dos cuñadas que habrían sido contratadas como «eventuales». De Alfonso no niega esas conversaciones e insiste en que mantiene múltiples contactos con diferentes personalidades «para recabar información», pero insiste en que no se trata de «ninguna conspiración» y que, ante la llamada de un ministro y la petición de información, él no tiene inconveniente en mantener el contacto.
Alas para los soberanistas
Pero el conocimiento de esas conversaciones ha dado alas al movimiento soberanista a las puertas de las elecciones generales de este domingo. La dirección de Esquerra ha pedido la dimisión de Fernández Díaz, y también el Govern de la Generalitat, a través de su portavoz, Neus Munté, ha pedido explicaciones a Fernández Díaz. El conseller de Justícia, Carles Mundó, de ERC, reclamó directamente su dimisión.
El soberanismo considera que el ministro trató de «fabricar» pruebas contra los dirigentes de los partidos independentistas para perjudicar el proceso político en marcha, justo antes del 9N.