El Gobierno y los expertos acorralan a Florentino Pérez por el proyecto Castor
Soria y el presidente de los geólogos de España ven indicios de una relación directa entre las inyecciones de gas y los terremotos
La seguridad del proyecto Castor se ha puesto en duda y eso puede pasar factura al empresario madrileño Florentino Pérez, que controla dos tercios de la concesionaria Escal UGS a través de ACS.
La presión a Florentino Pérez le ha llegado desde dos flancos muy distintos. El ministerio de Industria, que dirige José Manuel Soria, y los geólogos españoles. Ambos apuntan a una relación directa entre los terremotos –que han superado los cuatro grados, notándose en varias localidades de Castellón y Tarragona– y la inyección de gas por parte del almacén subterráneo.
Soria ha señalado que, tras la llegada de varios expertos para analizar la zona y la planta, «parece que hay una correlación directa”.
Florentino, contra las cuerdas
Esta afirmación ha destapado la caja de los truenos. De confirmarse en el informe ministerial que los temblores son consecuencia de la planta, la paralización de la actividad podría ser indefinida después de haberse invertido en este proyecto cerca de 1.300 millones de euros.
Además, esto pondría en peligro la inversión de otros 400 millones de euros por parte de Enagás que había acordado de antemano con Florentino Pérez quedarse parte de su participación a partir del próximo año. Sin embargo, tras la polémica suscitada, ¿entrará finalmente Enagás o se echará atrás y dejará solo a Florentino? De momento, habrá que esperar a las conclusiones finales y oficiales.
El caso ‘anormal’ de Castor
Pero Soria no es el único que acorrala a Florentino Pérez. El presidente del Colegio de Geólogos de España, Luis Suárez, asegura que existen indicios racionales de que hay una conexión entre la reserva de gas y los movimientos sísmicos. “Cuando se hace determinada actividad de este tipo se genera un hundimiento en el terreno y en este caso la inyección de gas también lo ha producido”, subraya a Economía Digital.
Pero, si lo normal en estos casos son microsismos de magnitud inferior a tres grados, lo extraordinario de este caso es que se han superado los cuatro grados en varias ocasiones y eso ha creado cierta alarma social. “En España hay tres reservas más y en el mundo hay centenares, pero lo que ha ocurrido con Castor es absolutamente excepcional. Se han producido terremotos de cierta magnitud y eso no es normal”, subraya Suárez.
En paralelo, el subdirector de Emergencias de Protección Civil de la Generalitat de Catalunya ha hecho hincapié en que para encontrar una serie sísmica de estas características habría que retroceder un siglo. Mientras, los expertos enviados por Soria tratan de desgranar qué ha ocurrido, cómo pero, sobre todo, por qué. Sólo así se disiparán todas las dudas que se están generando en torno a este caso.
Seguridad
Del mismo modo, fuentes del Observatori de l’Ebre aseguran que la gente está preocupada y que reciben llamadas a diario preguntando sobre los terremotos temerosos de su seguridad. “De momento, todos los temblores se han sufrido en la zona del depósito. El epicentro está allí y puede estar relacionado”, insisten.
Para evitar males mayores, fuentes gubernamentales aseguran que la actividad de la planta seguirá paralizada hasta recibir garantías de que la inyección no pone en peligro la vida de los ciudadanos.
Sin embargo, esta decisión no ha contentado a todas las formaciones políticas. Algunos partidos ya han expresado su desacuerdo y exigen el cierre definitivo del almacén.
Ataque al gobierno socialista
Por otra parte, el presidente de la Diputación de Castellón, Javier Moliner, ha asegurado que no le temblará el pulso ni dudará en emprender acciones legales contra los ex ministros socialistas responsables de la tramitación y adjudicación de la concesión si hay indicios de negligencia.
Los dirigentes a los que ha señalado Moliner por los cargos que ostentaban entre 2008 y 2010 son los ex ministros de Industria, Miguel Sebastián y Joan Clos y las ex titulares de Medio Ambiente, Elena Espinosa y Cristina Narbona.
“Me parece gravísimo que no se tuviesen en consideración las posibles afecciones sísmicas y que ahora estemos sufriendo decenas de terremotos cada día”, ha sentenciado Moliner.