Los ‘borrelines’ o los ‘catalinos’ que cambiaron la economía española
El cambio más espectacular que ha vivido España en los últimos 40 años fue protagonizado por los gobiernos socialistas de Felipe González. Sus políticas son conocidas. Pero la mayor transformación en las tripas de la administración lo no es tanto. En aquellos años, en la mitad de los ochenta, se forjaron economistas que quisieron cambiar las cosas, comenzando por los hábitos funcionariales de la capital de España.
Lo explica con mucha gracia el economista César Molinas en el prólogo del libro de su amigo el también economista David Taguas. El que fuera jefe de la oficina económica del Presidente Rodríguez Zapatero, acaba de publicar Cuatro bodas y un funeral, (Deusto), un análisis exhaustivo de los problemas de la economía española, en el que aporta también las posibles salidas a la crisis.
El caso es que Molinas explica que es amigo de Taguas desde hace más de 30 años, cuando se encontró con él en el Ministerio de Economía y Hacienda “un día de verano de 1986”. Entonces, el secretario de estado de Hacienda era Josep Borrell, y el jefe de gabinete era Toni Zabalza.
Explicaciones en inglés
Molinas había conocido a Zabalza durante su estancia en la London School of Economics. Y los dos ya hablaban de poder crear un grupo de economistas en España que acercaran la economía académica a la política económica y a la práctica de gobierno. Borrell les dio esa oportunidad, al llamar a Zabalza.
En pocos meses lo organizaron, contactando con economistas que estaban en el extranjero, con una gran formación, pero con un enorme desconocimiento de la administración.
Y se produjo el choque cultural. Los funcionarios les llamaban ‘los borrelines”, “por Borrell (la doble ele final no se pronuncia en Madrid”, o ‘los catalinos’, porque muchos eran de procedencia catalana.
Molinas explica que ellos no entendían lo que hacían en el ministerio, ni los economistas “que se tuviese que ir a desayunar tantas veces al día”. Y cuando tenían que explicarse cosas, entre ellos hablaban “en inglés”.
Por el grupo original del gabinete de Zabalza pasaron Miguel Sebastián, José Manuel González-Páramo, Juanjo Dolado, Javier Andrés, Eudald Canadell, Josep Baiges, Elías López o Antonio Lecea, entre otros.
Molinas lamenta que aquella “voluntad de transparencia” se haya perdido “en un manto de opacidad sobre el Ministerio de Hacienda, en donde se toman decisiones sin que los economistas, los ciudadanos y, probablemente, los funcionarios, puedan entender su racionalidad, si es que la tienen”.