Los resultados del Sabadell reflejan cierta recuperación del crédito
En el último trimestre de 2014, el saldo neto de los préstamos creció en 770 millones gracias a las pymes
Banco Sabadell ha dado a conocer los primeros síntomas de recuperación del crédito. Aunque en el último trimestre del ejercicio 2014, la actividad retrocedió un 2% respecto al verano, el saldo de las operaciones arroja 770 millones en positivo, gracias, sobre todo, a las empresas. Se trata de una señal tímida aún focalizada en sólo tres meses de actividad.
El presidente del grupo, Josep Oliu, ha asegurado que en 2015 «si el saldo global del sistema no crece a nivel estadístico, éste será cero». «Sin embargo, se percibirá el dinamismo y en nuestros cálculos preveemos que el préstamo crecerá globalmente el año que viene». El Sabadell anticipa que la recuperación del mercado se producirá, en esencia, a través del mismo actor: las pymes.
La mejora de la financiación será modesta, ya que el segmento familiar seguirá comatoso durante los próximos meses. La «aversión de las familias al riesgo es notable y no hemos conseguido que la demanda de nuevas hipotecas sea superior al stock existente».
A pesar de que en 2015 «costará trabajo», se lamenta Oliu, abrir nuevos préstamos para viviendas, el segmento de negocio frenará su caída debido a la mejora de los precios de los pisos, que elevarían la media de las pocas operaciones que se firmen. El repunte se trasladará al alquiler a partir del segundo semestre. «El arrendamiento siempre reacciona más tarde que la venta».
«Regar el jardín»
La prudencia en las previsiones se produce a pesar del manguerazo de liquidez que dio el Banco Central Europeo la semana pasada. El emisor controlado por Mario Draghi prometió un billón de euros largo en la compra de bonos soberanos para desatascar el crédito y que éste fluya hacia la microeconomía.
«Uno puede regar el jardín pero hace falta que salga el sol para que crezca la hierba». Oliu destaca que la decisión tomada en Fráncfort sólo presiona los precios a la baja, pero no es un elemento que garantice la fluidez del préstamo por si solo. Las lecciones de la crisis parecen estar detrás del diagnóstico del máximo responsable del Sabadell.
Aversión al riesgo
«Las familias y las empresas piensan ahora racionalmente, después de las angustias de la crisis y probablemente han redefinido su apalancamiento; esa adversión al riesgo hace que la gente se anime menos y la demanda sea realmente escasa. La realidad es que cualquier persona o empresa solvente que quiera financiación tiene crédito disponible y barato».
Las patronales y las asociaciones de consumidores sostienen, más allá de la disponibilidad, que la banca no ha rebajado la dureza de los exámenes de riesgo previos a la concesión de financiación. El Sabadell tampoco prevé revisar los criterios que aplica hoy por hoy.
Negocios alternativos
La situación de los préstamos, aún débil a pesar de los primeros síntomas, ha forzado al Sabadell a potenciar el negocio fuera de balance. Y seguirá la tendencia en los siguientes trimestres puesto que el consejero delegado, Jaume Guardiola, espera que dentro de un año pueda presentar un crecimiento neto del crédito entgre el 1% y el 2%. De ser así, el banco crecerá por encima del mercado –que lo hará en positivo, pero cerca del 0%– y será poco rentable.
Como contraposición, en los resultados anuales se escriben ya mejoras del 19,7% en las líneas de la cuenta que retratan los recursos de los clientes desviados hacia fondos y otros vehículos de inversión. El crecimiento del capítulo ha sido de 30.378 millones. El escenario de bajos tipos de interés explica, nuevamente, la diáspora del pasivo.
Crece el margen
El segmento de seguros, la gestión de patrimonio y los planes de pensiones parecen campar a sus anchas por las oficinas del Sabadell. Estas líneas suman 152.000 millones bajo gestión, una máquina, por otra parte, de generar comisiones.
El margen bruto crece el 20,7%, mientras que los intereses amasan un rendimiento del 24,5%. La purga del balance sigue. En un año, el Sabadell ha ganado 350.000 clientes particulares y 95.000 empresas. La tasa de morosidad se reduce en 146 puntos básico hasta el 12,17%. La inmobiliaria del Sabadell ha vendido 2.744 unidades (un 10% más de lo previsto) y la entrada de activos problemáticos se ha reducido.