Crèdit Andorrà exprime la crisis de BPA
El mayor banco del Principado capta unos seis millones de euros en la primera semana de intervención de su competidor
Crèdit Andorrà està haciendo su agosto en la montaña y en pleno invierno. El mayor banco del país habría captado unos seis millones de euros provenientes, principalmente, de antiguos clientes de Banca Privada de Andorra (BPA). La apertura de cuentas ha crecido exponencialmente desde el miércoles, día siguiente a la intervención del grupo rival por parte del Gobierno pirenaico, según diversas fuentes financieras.
Hasta que este lunes quedó decretado el corralito en BPA (los clientes pueden retirar 2.500 euros cada semana), el grupo de los Cierco ha perdido ocho millones de euros. La mayor parte han ido a parar al banco competidor, que dirige Josep Peralba. Por su volumen, es el más importante del país y el único al que los fiscales no ponen la proa.
Absorción de BPA
A pesar de ello, Crèdit Andorrà se ha negado a contestar las preguntas de este diario sobre la evolución de su pasivo. Alega que se expresa «mediante comunicados». El consenso de las fuentes andorranas da por hecho que se trata del mayor beneficiado de la crisis de BPA y no separan esta realidad de la dureza que muestra en las negociaciones con el Gobierno.
El Ejecutivo de Antoni Martí ha presionado para que Crèdit Andorrà absorba BPA. La posibilidad ha topado, primero, con la distancia y después con la firme resistencia de Xavier Cornella, director general, y del propio Peralba. Ambos alegan que antes de poner sobre la mesa una venta debe esclarecerse la situación de BPA, pendiente de una multa de hasta 340 millones de euros, que reduciría el valor a cero.
Negociaciones intensas
Durante el fin de semana, las conversaciones para hallar una solución a la crisis bancaria fueron intensas con todos los integrantes del sector financiero andorrano. Martí llegó a contemplar la nacionalización de BPA, pero la posibilidad quedó en un cajón y optó por el corralito. El democristiano aún insiste en que la competencia absorba el negocio de los Cierco.
Por su parte, Andbank (controlado por la familia Cerqueda) y Banca Mora (de la estirpe de los Mora) se habrían repartido, al menos, dos millones de euros antes custodiados por BPA. Las sospechas de blanqueo también se ciernen sobre ambas franquicias, al menos según explican a Economía Digital distintos fiscales españoles. Sin ir más lejos, Andbank fue el primer cobijo de los Pujol en Andorra.
Los clientes cruzan la calle
La mera posibilidad de que la situación de BPA se repita en ambos bancos hace que Martí prefiera a Peralba como aliado para superar la crisis. La negativa firme de Crèdit Andorrà ha dado sus frutos inmediatos en forma de más negocio. Absorber el grupo de los Cierco implicaría dos años de digestión, durante los que el dividendo estaría comprometido, y por ahora, los clientes (el fondo de comercio) han decidido cruzar la calle.
Crèdit Andorrà dispone de fondo líquidos por valor de 575 millones de euros y reporta un beneficio anual de 228 millones.