La facturación de Jaume Serra pone en evidencia a García Carrión
El fabricante de cava del grupo murciano factura sólo 6,4 millones de euros, con una capacidad de producción de 60 millones de botellas al año
El cava a menos de 3 euros Jaume Serra, propiedad del gigante vitivinícola J.García Carrión, se ha hecho un hueco en el mercado del vino espumoso catalán gracias a su bajo precio. Algunos informes sitúan a Jaume Serra como gran rival de los gigantes del cava en ventas en España, y su fábrica tiene capacidad para producir 60 millones de botellas al año, pero sus números no cuadran.
El mundo del cava es muy hermético y los fabricantes evitan decir cuánto producen. Datos de la consultora IRI otorgan a Jaume Serra una cuota del 11% en España, rivalizando con las principales marcas de los gigantes Freixenet y Codorníu.
Jaume Serra facturó el año pasado 6,36 millones de euros, según los datos depositados en el Registro Mercantil. Esto es un millón más que en 2014, pero casi ochenta veces menos que lo que factura Freixenet y sesenta veces menos que Codorníu. El cava de García Carrión se vende menos en el extranjero que las dos grandes marcas catalanas, y es más barato, pero aun así la diferencia es demasiado grande.
Producción incierta
Con unas ventas de 6,36 millones de euros, a 2,5 euros la botella, sale algo más de 2,5 millones de botellas, lo que no cuadra con la cuota del 11% de la que presume. Según el Consejo Regulador del Cava, en España se venden unos 90 millones de botellas, con lo que el 11% serían unos 10 millones. Con el resto de marcas de cava de García Carrión (Pata Negra y Cristalino), la cifra sube a 11 millones de botellas. Y sin contar lo que vendan en el extranjero.
Además, estos 2,5 millones de botellas estarían muy lejos de los 60 millones de botellas de capacidad de producción que tiene en la planta de Jaume Serra en Vilanova i la Geltrú (Barcelona), según información facilitada por García Carrión a Economía Digital en marzo. El grupo murciano también produce algunas marcas blancas. Las marcas de distribución suponen un tercio del mercado.
¿Quién se lleva el margen?
Los datos ponen en evidencia que algo no cuadra entre lo que se supone que produce García Carrión y lo que realmente sale de su fábrica. El gigante vitivinícola no ha respondido sobre el número de botellas que salieron de la planta de Jaume Serra el año pasado, ni sobre la relación comercial del productor de cavas con el grupo.
Según la memoria de 2015 de Bodegas Jaume Serra, el 100% de su cifra de negocio corresponde a servicios prestados a la matriz. Es decir que produce el cava para venderlo a García Carrión, que es quien lo comercializa, según se deduce de esta información. De esta manera, quien tendría el margen sería la matriz.
Menos beneficios
Las cuentas del año pasado de Jaume Serra arrojaron un beneficio de 623.000 euros, casi una tercera parte de los 1,76 millones ganados en 2014, dato que contrasta con el incremento de la facturación, en un millón de euros. Ni en 2014 ni en 2015, Jaume Serra dio dividendos a García Carrión, quien, además de ser su único cliente, es también su principal acreedor.
A cierre del anterior ejercicio, el fabricante de cava tenía una deuda de 6,29 millones con J.García Carrión SA, correspondiente a créditos para la renovación de las instalaciones de Vilanova i la Geltrú, una moderna y mecanizada fábrica en el interior de una finca del siglo XVII.