La banca controlará más del 60% del capital de Pescanova
En la propuesta de convenio pactada con Damm, Urgoiti mantiene la presidencia del grupo con la figura de un consejero delegado
El consejo de administración de Pescanova que analizará este viernes la propuesta de convenio pactada entre Damm, el fondo Luxempart y los principales bancos acreedores nacionales sabe que, de salir adelante, el peso accionarial de la nueva compañía se decantará hacia el pool formado por Bankia, Novagalicia, Sabadell, Caixabank, Popular y BBVA, una vez descolgado el Santander. Así, según fuentes financieras inmersas en las negociaciones, los bancos tendrán no sólo el control del consejo, sino también un peso accionarial que rebasará el 60% del capital de Pescanova una vez realizada una operación acordeón.
La propuesta para reflotar Pescanova, que compite con la liderada por los fondos Blue Crest y Knight Head –que tienen como hombre fuerte al exministro Eduardo Serra–, pasa por una inyección directa de la banca nacional que estará sensiblemente por debajo de los 200 millones de euros, frente a los 250 millones barajados inicialmente, mientras que el grupo de Demetrio Carceller y Luxempart desembolsará unos 30 millones. De acuerdo con esta propuesta, los minoritarios de Pescanova, actualmente suspendida de cotización y con la perspectiva de su exclusión del parqué madrileño, se quedarán con el 5% del capital, lo que dejará al grupo cervecero y sus socios con un paquete que no rebasará el 30% del accionariado de la nueva Pescanova.
Un planteamiento alejado de la idea inicial de Carceller, que pasaba por hacerse con el 49% de la compañía tras una inyección de 250 millones y una quita que sobrepasaba el 80% junto con Luxempart y los fondos KKR y Ergon.
Urgoiti, con un consejero delegado
La banca inyectará menos fondos de los previstos inicialmente porque, de acuerdo con el borrador que analizará este viernes el consejo, el dinero se destinará a la matriz y a las sociedades del perímetro de consolidación que puedan generar retornos a medio plazo, vía beneficios de explotación, caso de las filiales que controlan la flota pesquera. Otras sociedades que gestionan activos en el exterior, como puede ser la acuicultura (Portugal y Chile), con una proyección más deficiente en cuanto a su tasa interna de retorno, se verán abocadas a reestructurar su deuda de forma puntual con sus correspondientes acreedores.
Con el escenario que baraja la banca, la quita será de dos tercios de la deuda total, algo más del 65%, condonando unos mil millones de euros. Tan perfilada semeja la propuesta que sobre la mesa del consejo está la continuidad de Juan Manuel Urgoiti como presidente, aunque con una figura de nueva creación, la del consejero delegado. La creación del puesto de primer ejecutivo ha sido una imposición de los acreedores. La banca ya ha pactado que, en la reunión de este viernes, sólo voten la propuesta los consejeros independientes, mientras que los hombres de Carceller y de Luxempart se abstendrán.
El lunes, la administración concursal (Deloitte) presentará la propuesta de convenio ante el juez. Se abrirá un período de un mes para que los acreedores se adhieran al plan o manifiesten su rechazo.