La cadena vasca de fotografía Ikatz compra Fotoprix
El juez termina con la agonía de Fotoprix y la adjudica a Ikatz, la opción preferida por la plantilla
El culebrón de Fotoprix llega a su fin. El titular del juzgado mercantil número 10 de Barcelona ha decidido adjudicar la histórica cadena de fotografía catalana, en su día líder en España, a Ikatz, según ha comunicado este miércoles a la plantilla. La cadena vasca era una de las dos empresas que presentó oferta por Fotoprix y era la opción preferida por la plantilla, que entendía que era la que mejor futuro auguraba.
La propuesta que presentó Ikatz pasaba por sumar ambas redes, que son complementarias, puesto que casi la totalidad de su red se encuentra en el País Vasco. Esta empresa, que factura 4,1 millones de euros, salvaría 51 tiendas propias, además de las franquicias, y 161 trabajadores. Pagaría 150.000 euros y también modernizaría las tiendas, con una inversión de 1,7 millones. Además, se quedaría con el laboratorio, ya que actualmente tiene ese servicio subcontratado.
Esta oferta se enfrentaba a otra de la firma de comercio electrónico Flow 2007, que, de la mano de varios exdirectivos de Fotoprix, proponía un modelo continuista. Esta empresa proponía mantener 44 tiendas, que también modernizaría, salvaría 171 puestos de trabajo y pagaría 180.000 euros.
La plantilla de Fotoprix se posicionó a favor de la oferta de Ikatz y el juez le ha hecho caso
La plantilla, después de una asamblea, se posicionó a favor de Ikatz, pese a que salva a menos trabajadores, al considerar que da más seguridad empresarial y garantiza la continuidad y el mantenimiento del empleo a medio y largo plazo. Esta empresa vasca tuvo conversaciones con el comité de Fotoprix y se comprometió a minimizar el impacto negativo de los despidos. La plantilla actual de la empresa es de 191 personas.
El juez, pues, no optó por la mejor oferta económica, ni siquiera por la que más empleo salvaba, sino que prefirió escuchar a los trabajadores.
Fotoprix presentó concurso de acreedores en 2014 y, aunque en 2016 consiguió llegar a un acuerdo con la banca y salir del concurso, volvió a caer en enero después de que Hacienda embargara los ingresos de las tiendas para cobrar su deuda. Eso le llevó a presentar concurso de liquidación e iniciar la venta.