Abertis recrimina a Rajoy y a la banca cómo intentan salvar a las autopistas quebradas
El consejero delegado del grupo afirma que cada empresa es responsable de las concesiones y que la solución no debe poner en riesgo la seguridad jurídica del país
Abertis siempre se ha mostrado contraria a que las administraciones públicas rescaten las autopistas que han quebrado en España. El consejero delegado de una de las principales operadoras del país, Francisco Reynés, ha lanzado un aviso al Gobierno este viernes desde Barcelona: las políticas que se tomen para salvar las infraestructuras no pueden hacer temblar “la seguridad jurídica de España”.
Según el punto de vista del empresario, que el Ejecutivo salve los muebles de las nueve autopistas de peaje en riesgo de quiebra podría disuadir a los inversores extranjeros. “Para volver a invertir en España lo que nos piden son hechos, si hay seguridad jurídica o no. Esto es lo que más preocupa”, asevera.
“Que cada palo aguante su vela”, sentencia Reynés. Sus declaraciones chocan con el análisis de los grupos que se han pillado los dedos en alguna de estas infraestructuras. Desde estas compañías señalan que el problema en la concesión fue la previsión de explotación, un cálculo que realiza el Estado y se incluye en el pliego de condiciones del contrato.
Negociación de la quita
El Gobierno anunció a finales de marzo que se quedaría con las infraestructuras a cambio de una quita del 50% de la deuda que arrastran. Sería entonces de 2.300 millones de euros. Los ministerios de Fomento y Hacienda negocian desde ese momento con los seis grandes bancos del país que financiaron la construcción de las autopistas (Santander, BBVA, Caixabank, Sabadell, Popular y Bankia) y la patronal Seopan, que actúa como portavoz de los accionistas de las concesionarias. No llegan a un pacto sobre la cifra final de la quita, indican fuentes conocedoras de las negociaciones.
“Esperemos que no se tomen soluciones ad hoc que puedan hacer temblar las ideas de un país sólido jurídicamente”, ha señalado el consejero delegado de Abertis sobre esta cuestión.
Abertis estudia nueve aperturas de mercado
Reynés ha sacado pecho de cómo la compañía que dirige tiene repartido los activos: “Están muy relacionados con la estabilidad a largo plazo”. En España, representan un 30% de la cifra de negocios. El año ha arrancado con una buena noticia para los operadores de autopistas, ya que el tráfico ha crecido el 2,7% en los cuatro primeros meses. Con todo, aún está el 37% por debajo del nivel de antes de la crisis.
El directivo señala que es posible alcanzar de nuevo el uso que se hacía de las infraestructuras de pago antes de 2007. Ve el vaso medio lleno: “El mercado crecerá el 55%”. Por ello, Abertis no levanta el pie del nivel de inversión. En el ejercicio en curso tiene previsto inyectar 1.300 millones de euros en este capítulo, una tercera parte de ellos irán a parar a España. Aunque el interés de la firma es abrir nuevos mercados. Reynés ha reconocido que estudian ocho proyectos en cuatro países en los que no tienen presencia que esperan cerrar en los próximos meses.